Oficina de Servicios Canónicos
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Clases para Auxiliares de Procesos Matrimoniales
La exhortación papal Amoris Laetitia se nos anima a facilitar el retorno de los católicos a la práctica plena de la fe. Muchos feligreses les gustaría recibir los sacramentos, pero tal vez no les es posible porque tienen un matrimonio anterior y ahora viven con alguien sin estar casados por la Iglesia.
Para ayudar a nuestros feligreses con el proceso de nulidad matrimonial, la Oficina de Servicios Canónicos ofrecerá un taller (en inglés y español) para la formación de nuevos Auxiliares de Procesos Matrimoniales (anteriormente llamado ‘abogado’) para nuestro Tribunal Diocesano. Un auxiliar de procesos matrimoniales es el representante legal de alguna de las partes en un caso que se presenta ante el tribunal.
Ordinariamente los párrocos y los diáconos desempeñan este oficio. Sin embargo, los compromisos, la falta de tiempo y el número creciente de casos exigen incluir a otras personas capaces de realizar este ministerio. El Código de Derecho Canónico exige que las personas laicas que se destinan a ministerios especiales en la Iglesia adquieran la formación apropiada para desempeñar su función de manera adecuada (c.231, §1). Esta formación implica proveerles de la capacitación necesaria para convertirlos en expertos representantes de los intereses de alguna de las partes, además de colaborar con el tribunal en el descubrimiento de la verdad de la materia en cuestión la validez de un matrimonio.
En general, los aspirantes deberán ser personas capaces de destinar el tiempo que sea necesario para acompañar a la Parte Actora (el Demandante) para el proceso a veces largo y doloroso para presentarlo al Tribunal mediante una petición para una declaración de nulidad matrimonial. Deberán estar dispuestos y ser capaces de interrogar a las personas sobre cuestiones directas y difíciles de su historial matrimonial que son confidenciales por naturaleza pero que al mismo necesarias para determinar los motivos que llevaron a las partes a contraer matrimonio. Es de suma importancia confiar en la capacidad de la persona que se designa para trabajar con usted, la Parte Actora, y el tribunal. Los asuntos jurídicos nunca son simples. La capacidad para comprender situaciones difíciles y para trabajar con las personas beneficiará a cualquiera que aspire a desempeñar este ministerio.
Antes de que el aspirante pueda actuar como auxiliar de procesos matrimoniales deberá haber completado satisfactoriamente el curso, que consistirá en cinco sesiones semanales.